Jonás el millonario

Jonás Eriksson es un árbitro atípico, pita, en realidad, por vocación, tiene mucho dinero, pero nada le satisface más que convertirse en juez de un partido de fútbol.  Ha sido árbitro internacional absoluto con la FIFA desde 2002, profesional desde 1994 y de primera división de su país desde el año 2000. Eriksson ha arbitrado 175 partidos en la liga profesional más conocida como “Allsvenskan”, 47 partidos en “Superettan” otra competencia local y 63 partidos internacionales a partir de 2011. Inversiones acertadas   Eriksson no es rico por casualidad, ni siquiera por herencia, los ceros de su cuenta corriente son fruto de una  acertada inversión empresarial en televisión. Cuando ya era internacional consumó el negocio de su vida, invertiir previamente en un canal de televisión de su país, en donde tenía un 15% de acciones, posteriormente dicho canal, que poseía derechos de eventos deportivos, fue vendido y aunque Eriksson logró muchos millones de euros por sus acciones, no colgó el silbato. Feliz arbitrando Jonás es multimillonario ya que posee una fortuna en dinero disponible de más de 10 millones de euros. En muchos países, ser multimillonario supone tener una cantidad considerable de dinero mayor que otros adinerados, su fortuna es mayor a la que puedan tener todos los árbitros de Europa juntos y a sus 38 años, su vocación por el arbitraje y por todo lo que tiene que ver con este mundo es lo que lo tiene con los pies en la tierra, pues no ha pensado abandonar su carrera y en la actualidad nada le hace más feliz que arbitrar.  Como cualquier árbitro El incipiente multimillonario fue retirado de su internado sueco por inadaptación, antes de concluir sus estudios secundarios en Sigtuna, Suecia, desde que supo que tenía bastante dinero, comenzó a moderar su estilo de vida, no es ostentoso y hace lo que cualquier árbitro haría en sus mismas condiciones. El millonario también ha hecho uso de su enorme red social, cada año organiza una actividad deportiva donde invita a sus colegasde la asociación nacional  y a otras personalidades del fútbol que le han dado su apoyo para agradecer y conmemorar el trabajo anual. Gran empresario El árbitro sueco recientemente celebró sus 38 años el 28 de marzo de 2012, día del partido Barcelona- Milán, el cual dirigió. "Todos deberíamos dedicar más tiempo al deporte, yo en mi caso  dedico gran parte al arbitraje, si hubiera más deportistas, la calidad de vida sería mejor", explica. En cuanto al secreto para conseguir dinero comenta, "hay que gastar lo justo y dejarse de inversiones faraónicas que poco aportan; cuando acabe el arbitraje en 7 años o antes volveré a los negocios, en mis venas además de arbitro soy empresario, es lo otro que sé hacer muy bien".